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CONIN (Cooperadora para la Nutrición Infantil)

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Nombre de organización: CONIN (Cooperadora para la Nutrición Infantil)

Año de fundación: 1993

Sector: Primera Infancia / Salud.

Principales referentes: Abel Albino / Fernando Mönckeberg

Breve historia

CONIN fue fundada por el Dr. Abel Pascual Albino en la provincia de Mendoza, en Argentina, el 4 de septiembre de 1993. Albino tomó el exitoso modelo de CONIN Chile, ideado por su fundador el Dr. Fernando Mönckeberg, quien logró quebrar el flagelo de la desnutrición infantil en su país, y gracias al cual Chile posee el índice más bajo de desnutrición de Latinoamérica. El principal objetivo de Fundación CONIN es erradicar la desnutrición infantil en la Argentina, comenzando por Mendoza para luego extenderse al resto de América Latina y el mundo.

La fundación en números: 20 mil niños recuperados /14 programas/3500 voluntarios/500 profesionales de la salud.

Principal programa: Abordaje interdisciplinario de la pobreza extrema y la desnutrición.

Vínculo empresario: Existen apoyos de empresas de diversos rubros y de todo el país. Se está buscando apoyo activamente para la construcción de un nuevo hospital de desnutridos graves. Por eso se hace la cena de recaudación por los 25 años.

Premios

Web: www.conin.org.ar

Facebook: https://www.facebook.com/CONINArgentina/

Twitter: https://twitter.com/conin_argentina

Contacto: 0800-222-1620 / 0341-156700172

YouTube: https://www.youtube.com/user/FundacionCONIN

 

La visión de Abel Albino, Presidente de CONIN

Una historia o experiencia reveladora o transformadora: Yo me eduqué en el seno de una familia que amó este país. Por ejemplo, cuando mi padre hablaba de San Martín, lloraba. ¡Así fue la familia en la que me eduqué! De tanto en tanto, mi padre, siendo yo más grande, me pedía que lo llevase a un desierto de Mendoza; un desierto tremendo en el que antes estaban las Lagunas de Guanacache; digo desierto porque ya no existe ninguna laguna… desde hace más de cien años; y como hacía un calor insoportable, yo me defendía: ¡¿Pero, papá… hoy es un sábado de enero, y son las cuatro de la tarde, y hace cuarenta grados de calor… y quieres que te lleve al desierto?! Entonces, mi “viejito” me respondía con firmeza y humor: –Hijo, la familia no es democrática, es jerárquica. ¡Lléveme! Entonces yo lo llevaba a mi “viejito querido”; al llegar se bajaba, con su bastón señalaba los lugares y me decía: –Hijo, usted tiene que querer estas piedras y estos sauces, porque nos dieron todo. Nosotros, cuando llegamos aquí, no éramos nadie. El origen de nuestra familia son prisioneros de guerra portugueses que fueron deportados hace doscientos treinta años; este país nos recibió, nos dio todo: casa, comida, trabajo, educación… donde quiera que los Albino vamos, la gente nos recibe con amor y respeto. Hijo, aquí está enterrado su abuelo, su bisabuelo, su tatarabuelo… [Y ahora también está enterrado mi padre]. Por eso ¡usted tiene que querer a este país!

Con ese recuerdo, siempre vivo, yo amo a mi país porque esta es… ¡mi patria! Porque patria no viene de plata: patria viene de pater; patria es el lugar legado por nuestros padres; patria es el lugar donde están enterrados nuestros padres. Yo no sólo tengo la obligación de trabajar por mi patria, ¡también tengo el derecho de hacerlo!

Un sueño: Erradicar la Desnutrición Infantil en Argentina.

Un héroe: Albert Bruce Sabin.

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