Según el reporte anual del Global Impact Investing Network (GIIN) de 2017, el mercado global de inversión de impacto representa aproximadamente U$S 114 mil millones de activos bajo administración. Latinoamérica, posee una modesta cuota de participación en dicho mercado, alcanzando los U$S 7.2 mil millones (9% del total). (GIIN, Annual Impact Investor Survey, 2016)
Argentina, por su parte, se encuentra en las etapas iniciales del desarrollo de este tipo de inversiones, con un largo camino aún por recorrer, pero dando pasos firmes en el fortalecimiento del ecosistema. Así lo afirmaron especialistas de diversas instituciones reunidos en la “XV Jornada Anual 2017 del Grupo de Fundaciones y Empresas (GDFE): Inversiones de Impacto en Argentina” celebrada el 26 de septiembre en la Ciudad de Buenos Aires.
El primer reporte de Inversión de Impacto en Argentina (2017) afirma que se trata de un cambio de paradigma respecto de cómo el capital se alinea detrás de proyectos y empresas innovadoras para resolver algunos de los problemas más urgentes y complejos de nuestra sociedad.
Este cambio es tanto para la inversión tradicional como para la filantropía. Para la primera, la propuesta es sumar al análisis del retorno financiero, el análisis del impacto social y/o medioambiental, estableciendo los métodos necesarios para la medición y reporte de dicho impacto. Para la segunda, la invitación es hacer un uso más estratégico de sus fondos, generando impactos más sostenibles en el largo plazo, mediante la incorporación de la búsqueda de retorno financiero y mayor rigor en las métricas de impacto social y ambiental.
Actualmente Argentina cuenta con tres fondos de inversión de impacto. Éstos son Vira Ventures, el fondo del Grupo Pegasus, de U$S 30 millones, que se encuentra en proceso de funding y pretende invertir en startups que atiendan las necesidades de la clase media emergente, adultos mayores, medio ambiente, entre otros; y el fondo de NXTP Labs, de U$S 120 millones (BID), ganador de la convocatoria de FOMIN (U$S 5 millones) para convertirse en el primer fondo de impacto de Argentina, Uruguay y Paraguay.
Asimismo, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se encuentra desarrollando un “Vínculo de Impacto Social”, medio de inversión de impacto de vanguardia en la región. El mismo tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los jóvenes ni ni (ni estudian, ni trabajan) de la zona sur de la ciudad y lo alcanzará mediante el trabajo conjunto de varios actores. Por un lado los inversores privados que aportan el capital, por otro las organizaciones de la sociedad civil que atacan directamente el problema, por otro lado un veedor internacional que verificará el cumplimiento del impacto social pretendido y, finalmente el gobierno de la ciudad que sólo devolverá el capital a los inversores más un retorno acordado, siempre y cuando se alcance el impacto pretendido.
El Gobierno Nacional, por medio del Ministerio de Producción, lanzó este septiembre la convocatoria para fondos semilla, de aceleración y de expansión en el marco del Fondo Fiduciario para el Desarrollo del Capital Emprendedor (“FONDCE”), creado por el artículo 14 de la Ley de Emprendedores. Dicha convocatoria cuenta con expresos criterios de inversión de impacto, reservando cupos de este gran fondo para incubadoras y aceleradoras sociales y para aquellos fondos de expansión que integren cuestiones ambientales, sociales y de gobierno corporativo en sus inversiones.
Finalmente, ya existen varias empresas de impacto que han recibido el apoyo de inversores nacionales e internacionales: usound (tecnología para personas con dificultades auditivas), semtive (energía eólica), Gi Bike (transporte sustentable), incluyeme.com (trabajo para personas con capacidades diferentes), entre otros.
3 puntos más relevantes del encuentro:
- Retorno Vs. Impacto
Existe un inconsciente colectivo que sostiene que las inversiones responsables no generan tanto retorno financiero como las inversiones tradicionales. No obstante, Sebastián Welisiejko, Director del Global Steering Group for Impact Investment (GSGII), sostuvo que “invertir en impacto tiene buenos retornos, hay que desterrar la idea de que se pierde por invertir en impacto”.
Los inversores argentinos que estarían interesados en invertir en empresas ya desarrolladas con impacto (pre Series A), señalaron que el retorno esperado era de un promedio de 22%, y van desde un 18% hasta un 28% en la muestra relevada (Grupo de Trabajo de Inversión de Impacto).
Estas expectativas están por encima de las estadísticas del reporte GIIN, que sostienen que el retorno promedio en inversiones de impacto de capital o equity es de 9,5% en mercados desarrollados y de 15,1% en economías emergentes (GIIN, 2016).
- El mundo financiero está madurando y evolucionando hacia la sostenibilidad social y medioambiental.
Matías Bendersky, Jefe de la Unidad de Alianzas Estratégicas y Movilización de Recursos del BID, afirmó que los “Inversores institucionales, como Goldman Sachs, están incorporando criterios de evaluación medioambiental y social sobre las inversiones. Esto implica que estamos frente a un mainstreaming (Tendencia dominante que permea hasta hacerse algo comúnmente aceptado y usado) de temas sustentables entre inversores”.
En la misma línea, Constanza Gorleri, Gerente de Sustentabilidad de Banco Galicia, afirmó que “las entidades financieras están evolucionando,” y comentó cómo el banco viene avanzando hacia nuevos instrumentos financieros para hacer posible la inversión de impacto, entre ellos están trabajando en la generación de un Fondo de Impacto para Argentina. Asimismo, aseveró que “los inversores extranjeros miran al banco con buenos ojos y lo financian por estos nuevos negocios a los que está apuntando, negocios con propósito”.
Si bien la evolución ya está dando sus primeros pasos, cabe destacar que la inversión de impacto aún es muy pequeña (U$S 114 mil millones) en relación a los montos que maneja la inversión tradicional a nivel global (U$S 212 trillones) (Grupo de Trabajo de Inversión de Impacto).
- Necesidad de aunar esfuerzos entre todos los sectores
Sebastián Welisiejko puso en palabras la sensación general del auditorio “Es tan fundamental que nadie x si mismo puede empujar al ecosistema, por eso estamos reuniéndonos varios actores de distintos sectores”.
De este modo, a fines de 2015, diversos actores del país se unieron en un Grupo de Trabajo de Inversión de Impacto, con el objetivo de abrir camino a este mercado en Argentina. En julio de 2017 consiguieron un asiento en el GSGII, como National Advisory Board para Argentina y Uruguay. Esto le permitirá a Argentina estar presente donde se toman las decisiones de impacto a nivel global y ser pioneros en Latinoamércia.