Un camino actual hacia la sostenibilidad
En los últimos años se produjeron diversos sucesos que desestructuraron al mundo tal como lo conocíamos. Entre ellos, se encuentran la degradación del medio ambiente, la pérdida de biodiversidad, la pandemia y los conflictos armados. Al respecto, el 4 de octubre de 2023, con motivo de la celebración de la festividad de San Francisco de Asís, se publicó la Laudate Deum. En esta exhortación, el Papa Francisco complementa la encíclica Laudatio Si de 2015 y hace un llamado a la corresponsabilidad frente a la crisis climática. También, en el último año, entre noviembre y diciembre, se llevó a cabo la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, COP 28 (Conference of the Parties, en inglés), en Dubai. A pesar de no poder asistir por motivos de salud, el Pontífice instó a implementar una conversión ecológica global y a dejar de lado los nacionalismos en favor de una visión global compartida. Ya desde la década de los setenta, los científicos han advertido sobre el cambio climático, abogando por la necesidad de establecer mecanismos de vigilancia. En la actualidad, nos dirigimos hacia la COP 29, una llamada global a la acción climática programada para noviembre de 2024 en Azerbaiyán.
Previamente, el Papa Francisco ya había emplazado a iniciar un proceso de cambio global para adoptar una economía más justa, inclusiva y sostenible, sin dejar a nadie atrás. En mayo de 2019, con motivo de la festividad de San José Obrero, convocó a jóvenes economistas, emprendedores, empresarios y mujeres de negocios de todo el mundo para un encuentro en Asís en marzo de 2020, que debido a la pandemia se pospuso y se realizó virtualmente en noviembre de ese año. En su convocatoria, reclamó un cambio en la economía actual, enfocándose en valores que hagan vivir y no maten, que incluyan y no excluyan, que humanicen y no deshumanicen, y que cuiden la creación en lugar de depredarla.
En otra vertiente, este mundo cada día más complejo e interdependiente demanda una mayor calidad y cantidad de información. Las empresas, en particular, deben rendir cuentas sobre su responsabilidad socioambiental y presentar informes financieros de sostenibilidad. En este contexto, el 26 de junio de 2023, el Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad publicó sus dos primeras Normas Internacionales de Divulgación de Sostenibilidad, vigentes desde el 1 de enero de 2024. Estas disposiciones, la NIIF S1 y la NIIF S2, abordan los requisitos generales de divulgación y las revelaciones relacionadas con el clima respectivamente, en el campo disciplinar de la contabilidad socioambiental.
Con el propósito de entrelazar a la Economía de Francisco con la Contabilidad Socioambiental, considero importante destacar lo siguiente. Por un lado, la Economía de Francisco busca redefinir las prioridades económicas, fomentar la solidaridad y trabajar a favor de un desarrollo que respete la dignidad humana y la preservación del medio ambiente. En otro aspecto, la Contabilidad Socioambiental se presenta como una herramienta alternativa para plasmar estos ideales de la Economía de Francisco en prácticas tangibles y cuantificables.
En resumen, al integrar estas dos disciplinas, se abre un camino hacia una concepción económica que incluya adecuadamente los impactos tanto sociales como ambientales. Este enfoque holístico no solo refuerza la importancia de la sostenibilidad en el ámbito económico, sino que también refleja la necesidad de adoptar prácticas empresariales y financieras que contribuyan al bienestar humano y al equilibrio con nuestro entorno natural.
Muy buen artículo que resume claramente la degradación del medio ambiente y nuestra responsabilidad social para contribuir a preservarlo