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Inversión y empleo (2025-30): ¿proyección o esperanza?

Ser mujer y líder
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A partir del presupuesto de que vivimos en una sociedad global tecnológica competitiva a la deriva(1), compartiremos una proyección incómoda respecto del futuro económico, social y laboral, poniéndola en relación con la importancia de la cooperación y la práctica de valores en pequeños círculos(2).  

1. Inversión y empleo en la era de la inteligencia artificial 2025-2030

 Hoy el capitalismo se halla a nivel global en una crisis descomunal en términos de relación deuda/PBI, del 240% promedio en 2022(3).  Así y todo, nos guiamos-engañamos con la “fórmula virtuosa” Inversión = empleo = consumo = desarrollo humano más propia de la era paradigmática de movilidad social ascendente de 1945 a 1975. 

Por su parte, un crudo balance express de la historia económica argentina reciente atendiendo a dos grupos de variables (a) macroeconómicas: deuda/PBI, relación productos industrializados/economía primaria y b) microeconómicas: salario real/pobreza, cantidad de salarios mínimos para comprar casa propia), indica que todo empeoró de 1976 a 1983, de 1983 a 1989, de 1989 a 2003, de 2013 a 2019 y de 2019 a 2025. 

Para rematarla, múltiples pronósticos(4) vienen augurando desempleo masivo:  no es casual que la ONU y el Foro Económico Mundial promuevan sistemas de asistencia universal. La llamada “uberización” de la economía (ser usuario más que propietario), si bien conlleva ventajas y posibilidades de flexibilidad socioeconómica y cultural, en la práctica sincera el hecho de que en todo el mundo occidental el salario real – y la rentabilidad empresarial promedio, salvo del sector financiero- decrece. 

2.Diagnóstico proyectivo realista de la economía global y argentina 2025-2030

Aunque sea doloroso, no vemos pues serios fundamentos a una “esperanza de un futuro mejor”. En Argentina, desde hace lustros con una economía más “primarizada”, abierta a la importación de bienes de consumo finales y con un mercado de trabajo más precarizado, cuesta creer en una “recuperación de la economía argentina”, en líneas generales estructuralmente estancada desde 2013. Sincerar las cuentas y la comunicación sin alterar los indicadores estadísticos está bien, pero la promesa de un mágico “efecto derrame” o “rebote” según el cual en un inicio aumentaría la pobreza y luego se revertiría, es poco creíble. Y no se trata de tal o cual gobierno, sino del desarrollo tecnológico y la orientación de las inversiones – muy cortoplacistas- en el capitalismo de los últimos años, donde la inversión privada (base de una economía sana y libre) no necesariamente genera empleo. De hecho, la mayoría de las inversiones corporativas en automatización, IA o chat gpt, tiene como fin eliminar empleo y/o reducir costos no por “maldad” sino para seguir siendo competitivos. Y en un mundo donde la IA sustituye diseñadores y programadores, no habría nuevos rubros que en su conjunto incorporen la mano de obra desplazada – como si sucedía de 1945 a 1975- tal como incluso pronostica el WEF. Y las pymes, de casi todos los rubros, si se reduce el poder adquisitivo del grueso de la población, caen más tarde o más temprano.

3.Del pecado de la desesperanza a la imaginación de respuestas con valores y cooperación

Ciertamente la desesperanza es una suerte de pequeño gran pecado, sin embargo, creemos mejor una proyección “oscura” basada en innegables elementos que la realidad y sus tendencias nos muestran que pensar presente y futuro como si pudiéramos situarnos eternamente en 1945 donde estaba todo por (re) hacer. 

Finalmente, la esperanza se vincula mejor con un mundo donde la sociedad civil haciendo uso de su libertad asociativa tiene mayor gravitación; recuerdo con alegría cuando Gastón Vigo Gasparotti comentó en la 33 jornada anual de Acde joven que en las primeras décadas del siglo XX los hospitales no los hacía el estado sino la sociedad civil organizada comprometida en torno a valores de justicia, solidaridad y cooperación.

 Es posible entonces pasar de la fe ciega y la desesperanza a la voluntad de ir construyendo pequeños mundos mejores.

Referencias

  1. Stelkic Abergo, Mauricio. Los valores y la dicha en pequeños círculos – I – La sociedad global tecnológica competitiva a la deriva. https://empresa.org.ar/2024/la-sociedad-global-tecnologica-competitiva-a-la-deriva/
  2. Stelkic Abergo, Mauricio. La acción solidaria y la acción cooperativa. Último artículo de una saga de tres, que giran en torno a los valores y la dicha en pequeños círculos. En dicho artículo está la referencia al artículo 2do y en este en la del primero, para quien quiera leerlos como un todo coherente  http://empresa.org.ar/2024/la-accion-solidaria-y-la-accion-cooperativa/
  3.  Pussetto, L., La deuda mundial, bajo la lupa. IAE business school. https://www.iae.edu.ar/2024/04/la-deuda-mundial-bajo-la-lupa/
  4.  El MIT trabaja con escenarios de hasta un 80% de desempleo mundial (2017)  https://elpais.com/retina/2017/08/10/tendencias/1502362809_488733.html 

Sobre el autor

Mauricio Stelkic Abergo

Prof. de enseñanza media y superior en Historia, UBA. Docente, capacitador, investigador independiente y conferencista desde 2005. Se ha orientado a desarrollar educación familiar psico-ambiental neuro-sensitiva y proyectos de microciudades autosuficientes cooperativas, siguiendo criterios de desarrollo integral de la persona y la comunidad.

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