La simplificación de la realidad en modelos más accesibles para conocer y divulgar tiende a «modelizar» y agrupar posiciones de la propia gente que, de pronto, se ve etiquetada en alguno de los bandos en pugna en los extremos con que muchas veces de polariza la opinión pública. El escrutinio permanente de expresiones también conlleva un esfuerzo adicional por ubicar a cualquier desprevenido en alguno de los márgenes de esta grieta imaginaria que parece ser funcional para los que promueven estas dicotomías. ¿Todo es binario? ¿Tesis y antítesis es la línea continuar de la historia? Esta semana fue un ejemplo de lo que podría esperar para este año, que como todos los impares desde 1983 será electoral.
- Ignacio Labaqui: Los riesgos de estar en la cresta de la ola, Perfil 2/2. El capital político del que dispone hoy el Gobierno no es infinito. Debe saberlo.
- Carlos Manfroni: La agonía de la cultura woke y la recuperación de la conciencia, La Nación, 28/1. Desde distintos rincones del planeta, desde Donald Trump hasta Javier Milei y Georgia Meloni, han surgido quienes con voz suficientemente fuerte gritan que el rey está desnudo y que su traje era una estafa. Es la “revolución del sentido común”, como la llamó el propio Trump en su asunción.
- Luciano Román: Un funcionario en peligro de extinción, La Nación, 30/1. El servicio público ha perdido profesionalismo e independencia; sin embargo, hay un caso que condensa las virtudes y valores que supieron caracterizarlo y que todavía sobreviven en algunos estamentos del Estado.
- Sofía Diamante: Leopoldo Tornarolli: “La pobreza cayó más de lo esperado, pero persisten problemas estructurales”, La Nación 2/2. El economista analizó la dinámica de la pobreza en el último año y explicó por qué el mercado laboral prácticamente no varió en la última década, pese a las crisis económicas.
- Felipe Frydman: Se buscan filántropos, Clarín, 31/1. Con la creación de la figura de «embajadores comerciales para inversiones y desarrollo estratégico», el gobierno del presidente Milei no escapa a la tentación de ensayar artificios de originalidad para mostrar dinamismo e inventiva.
- Jorge Lapeña: Incógnitas de nuestro futuro energético, Clarín, 31/1. La Argentina transita un presente energético complejo, resultado de grandes cambios producidos en los últimos 25 años.
- Juan Luis Bour: El boom del empleo precario y el “maquillaje” de cifras con ciertos rubros, La Nación, 2/2. El kirchnerismo facilitó formas de empleo informales o semiformal, entre ellos fue el monotributo social, que tuvo una fuerte suba entre 2012 y 2023; en ese tiempo, el empleo público y el trabajo precario sumaron 2,12 millones y el privado formal, 300.000.
- Ariel Maciel: Diálogo y consenso, la apuesta del círculo rojo para aplacar brotes de inseguridad y violencia, Perfil, 31/1. Esa agenda se abordó en el segundo encuentro de un año considerado “clave”, por sus implicancias políticas, económicas y electorales.
- Daniel Sticco: Daniel Marx: “Se ve una consolidación de expectativas de tasas de devaluación y de inflación hacia abajo”, Infobae, 2/2. El ex secretario de Finanzas analiza el impacto del canje de deuda, la evolución del riesgo país, las perspectivas del acuerdo con el FMI y los desafíos del tipo de cambio real y de atraer inversiones.
- Ariel Coremberg: Efecto DeepSeek: nada nuevo bajo el sol del capitalismo, La Nación 2/2. La startup china no es más ni menos que una nueva disrupción típica del modelo chino de bajos salarios ahora de ingenieros informáticos, pero con la característica de haber reducido la eficiencia informativa y aumentado la censura.
- Jorge Castro: Donald Trump hace lo contrario del “proteccionismo” tradicional; Clarín, 1/2. a sabiduría económica norteamericana tiene absolutamente claro que en el capitalismo del siglo XXI las inversiones son más importantes que el comercio; y por eso quiere abrir la economía global con sus sanciones y tarifas a la superior productividad de la economía norteamericana.
- Ginia Bellafante: ¿Qué pasará con la economía de Nueva York si hay deportaciones masivas?, The New York Times, 2/2. Importantes sectores como la construcción, las guarderías y los restaurantes dependen en gran medida de trabajadores indocumentados, a quienes sería difícil sustituir.