Enrique Shaw, se encuentra a un paso de ser proclamado beato, al pasar la segunda instancia del proceso, con la aprobación “unánime” de la Comisión de Teólogos que reconoció este martes 17 de junio, la oración de intercesión dirigida al “candidato” y los frutos de la misma en el milagro que se le atribuye. Así se lo confirmó a AICA monseñor Santiago Olivera.
“La causa de Enrique Shaw ya pasó la primera instancia que fue la consulta médica y ahora los peritos teólogos, que estudian las oraciones dirigidas al “candidato” y los frutos de la misma, manifestaron este martes el parecer unánime acerca de la oración pidiendo la gracia de la curación”, explicó el obispo castrense, vicepostulador de la causa de canonización. “En unos meses irá a la tercera instancia que es la Ordinaria de obispos y cardenales”, agregó.
“Una vez tenido el parecer favorable -indicó monseñor Olivera- el cardenal prefecto lo presentará al papa León XIV y el Santo Padre, si lo considera, firmará el decreto autorizando su beatificación”. “Hay que seguir rezando con renovada fe y confianza”, animó el vicepostulador de la causa de canonización del primer presidente de ACDE.
En abril de 2021, el papa Francisco autorizó la promulgación del decreto que reconoce las virtudes heroicas del venerable empresario, laico fiel y padre de familia numerosa. En enero de este año 2025 el milagro atribuido a su intercesión superó la instancia médica y ayer recibió la aprobación de la comisión teológica.
La causa fue iniciada por ACDE a instancias del Cardenal Jorge Mejía, en una invitación que pronto tomó cuerpo y se organizó el trabajo. El primer postulador de la causa en su fase diocesana fue Juan Cavo y luego de su fallecimiento tomó la responsabilidad Fernán de Elizalde y luego Juan Navarro Floria hasta la conclusión de dicha fase y su pase a Roma, siempre con la ayuda inestimable de Elizalde, como vicepostulador, un todoterreno en esta tarea inmensa. En 2015, ya en la instancia vaticana, la postuladora designada fue la canonista rosarina y residente en esa ciudad, Silvia Correale, que también llevó otras causa entrañables para los argentinos como la del Cura Brochero, Camila Rolón y Mama Antula.
Desde muy joven Shaw tuvo el propósito de avanzar en el camino de la santidad. Su vida fue testimonio de virtudes cristianas, demostró que es posible conducir con eficacia una empresa aplicando los principios de la Doctrina Social de la Iglesia.
Enrique Shaw fue uno de los impulsores de la creación de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) y fue su primer presidente. Integró el Primer Consejo de Administración de la UCA, trabajó para conformar la Acción Católica Argentina (ACA) y el Movimiento Familiar Cristiano (MFC) y promovió la sanción de la Ley de Asignaciones Familiares. Su vida está repleta de logros y trabajos y su legado sigue inspirando el testimonio de muchos que sienten el llamado a la co-creación de la “noble vocación” del empresario, como nos recordara hace poco tiempo el papa Francisco.