Introducción: Textos originales de Enrique Shaw

Los comienzos de ACDE

Entre los escritos inéditos de Enrique Shaw quedaron 21 carpetas en formato para conferencias, que se irán publicando por temas y fueron transcriptas por Silvia Bertani. 

El texto siguiente se encuentra en las carpetas Nº 8 y Nº 14 del archivo AyBEES en la Biblioteca Central de la Universidad Católica Argentina.

Al terminar la II Guerra Mundial, Pío XII envió una carta al Episcopado argentino informando sobre la dramática situación de la posguerra en Europa y pidió colaboración.

Como respuesta, dentro de la Acción Católica se constituyó una “Comisión Pro-ayuda a Europa”, donde había industriales que tenían la inquietud de cómo aplicar la doctrina social de la Iglesia.

Enrique Shaw muy joven se ofreció a colaborar y le pidieron que ayude a organizar la Subcomisión de Industriales y Comerciantes de la Comisión Arquidiocesana y allí participó como secretario honorario (AyBEES, 14.7).

Años más tarde, él comentó que el trabajo en esta Comisión fue clave para el comienzo de su labor en el mundo empresarial, allí se consolidó un grupo que compartían muchos objetivos. Intentaron algunos de los que trabajaron en esa comisión para asistir a Europa, seguir trabajando juntos para ser empresarios más cristianos y conectar al mundo empresario con la Doctrina Social de la Iglesia vinculando su trabajo con la santificación.

Se reunieron en casas particulares entre 1951 y 1952 en las que empresarios con similitudes van delineando la formación de una asociación que agrupará a gente con vocación de dirigentes de empresas de Argentina “con sujeción al espíritu y a la doctrina de la Iglesia”. 

En esas primeras reuniones se definieron los objetivos y se delinearon futuras actividades.

La elección del término “dirigentes de empresa” obedece a que esta expresión es más abarcativa que otras, ya que incluye aquellas personas que, por su posición dentro de una empresa, puedan influir sobre el manejo de la misma.

En una reunión en la casa de Enrique se concreta esta iniciativa el 3 de diciembre de 1952. Se inició la asociación de empresarios cristianos como un lugar donde poder tratar los problemas propios en cuanto dirigentes de empresa. 

Los estatutos fueron aprobados según consta en el acta de Constitución, por el Cardenal Arzobispo de Buenos Aires, Santiago Luis Copello (acta de Constitución, ACDE, Libro de Actas, Bs. As., 3/12/1952, AyBEES, 177, f. 2).

Quedó constituida la primera Comisión Directiva por Hernando Campos Menéndez, Carlos S. Llorente, Francisco Muro de Nadal, Miguel Alfredo Nougués, Jorge Pérez Companc, Basilio Serrano, Enrique E. Shaw, Julio Steverlynck y Fernando Tornquist. 

Contaban con el asesoramiento espiritual del padre Manuel Moledo.

Enrique Shaw, inaugurando este nuevo emprendimiento, expuso los escritos referidos a continuación, dentro de las 21 carpetas en las cuales escribía apuntes para sus conferencias.